viernes, 27 de marzo de 2009

Fragmento de Mi vida

"¿y de la suerte que en todo esto ha corrido su persona, qué me dice usted? Ya me parece estar oyendo esta pregunta, en la que la ironía se mezcla con la curiosidad. A ella, no puedo contestar con mucho más de lo que ya dejo dicho en las páginas del presente libro. Yo no sé que es eso de medir un proceso histórico con el rasero de las vicisitudes individuales de una persona. Mi sistema es el contrario: no sólo valoro objetivamente el destino personal que me ha cabido en suerte, sino que, aun subjetivamente, no acierto a vivirlo si no es unido de un modo inseparable a los derroteros que sigue la evolución social. 
¡Cuántas veces, desde mi expulsión, he tenido que oír a los periódicos hablar y discurrir acerca de mi "tragedia" personal! Aquí no hay tragedia personal de ninguna especie. Hay, sencillamente, un cambio de etapas en la revolución"
 Leon Trotsky

viernes, 13 de marzo de 2009

sobre el materialismo histórico

" Esta concepción, a diferencia de la idealista, no busca una categoría en cada período, sino que se mantiene siempre sobre el terreno histórico social; no explica la práctica partiendo de la idea, sino que explica las formaciones ideológicas sobre la base de la práctica material; por lo cual, llega consecuentemente a la conclusión de que todas las formas y todos los productos de la conciencia, no pueden ser destruidos por obra de la crítica espìritual, mediante la reducción a la `autoconciencia´ o la transformación en fantasmas, espectros, visiones etc. sino que sólo pueden disolverse por el derrocamiento práctico de las relaciones sociales reales de las que emanan estas quimeras idealistas. La fuerza propulsora de la historia, incluso de la religión, la filosofía y toda teoría no es la crítica sino la revolución" K. Marx

testamento de trotsky

"Fui revolucionario durante mis cuarenta y tres años de vida consciente y durante cuarenta y dos luche bajos las banderas del marxismo. Si tuviera que comenzar todo de nuevo trataría, por supuesto de evitar tal o cual error, pero en lo fundamental mi vida sería la misma. Moriré siendo un revolucionario proletario, un marxista, un materialista dialéctico y, en consecuencia, un ateo irreconciliable. Mi fe en el futuro comunista de la humanidad no es hoy menos ardiente, aunque sí más firme, que en mi juventud.
Natasha se acerca a la ventana y la abre desde el patio para que entre más aire en mi habitación. Puedo ver la brillante franja de césped verde que se extiende tras el muro, arriba el cielo claro y azul, y el sol brilla en todas partes. La vida es hermosa. Que las futuras generaciones la libren de todo mal, opresión y violencia y la disfruten plenamente."

miércoles, 11 de marzo de 2009

RD

 "Desde el punto de vista político, lo verdaderamente relevante para mí fue confirmar que cuando uno toma una decisión sobre lo que va a hacer de su vida, ni la muerte es capaz de hacerlo dar marcha atrás. Y hay que ser rápido en las decisiones. ¿Que ahora nos toca morir? Bueno, hay muchísimos otros a nuestras espaldas. Cuando tú tomas esa decisión, nada que haga el enemigo podrá afectarte verdaderamente. Creo que inclusive es simple."

Ese cerebro no ha dejado de pensar *

 " Caen los ídolos de sus altares y las divinidades ven cómo se disipan las nubes de incienso oloroso. El hombre cobra conciencia de la realidad objetiva, se apodera del secreto que impulsa la sucesión real de los acaecimientos. El hombre se conoce a sí mismo, sabe cuánto puede valer su voluntad individual y cómo puede llegar a ser potente si, diciplinandose a la necesidad, acaba por dominar la necesidad misma identificándola con sus fines. ¿Quién se conoce a sí mismo?, no el hombre en general, sino el que sufre el yugo de la necesidad. La búsqueda de la sustancia histórica, el fijarla en el sistema y en las relaciones de producción y cambio, permite descubrir que la sociedad de los hombres está dividida en dos clases. La clase que posee el instrumento de producción se conoce ya necesariamente a sí misma, tiene conciencia, aunque sea confunsa y fragmentaria, de su potencia y de su misión. Tiene fines individuales y los realiza a través de su organización, fríamente, objetivamente sin preocuparse de si su camino está empedrado con cuerpos extenuados por el hambre o con los cadáveres de los campos de batalla" Antonio Gramsci

* Cuando Mussollini manda a prisión a Gramsci ordena a sus carceleros: "que ese cerebro deje de pensar!"